Un Centro Especial de Empleo (CEE) es una entidad cuyo objetivo principal es facilitar la inserción laboral de personas con discapacidad. Estos centros permiten a las personas superar las barreras y dificultades en su acceso al empleo ordinario, asegurando tanto su permanencia como su desarrollo en el puesto de trabajo.
Los CEE cuentan con Unidades de Apoyo que prestan servicios de ajuste personal y social, ayudando a los trabajadores y trabajadoras a integrarse tanto en el ámbito laboral como en la sociedad en general. Estos servicios abarcan desde la superación de obstáculos laborales hasta la inclusión social, cultural y deportiva.
Aunque su objetivo principal es la actividad productiva, los CEE también están diseñados como un puente hacia el empleo en el mercado ordinario.
Por ley, al menos el 70% de la plantilla de un CEE debe estar compuesta por personas con una discapacidad igual o mayor al 33%, y los servicios de apoyo son obligatorios para asegurar su inclusión y desarrollo laboral.